domingo, 25 de noviembre de 2018

"Y por mi vinieron..."


El problema no es votar a gente incompetente o corrupta, el problema no es quedarte quieto cuando ves que los políticos mienten y engañan, el problema no es una población que dice con orgullo: Yo paso de la política. El problema son los otros, a veces son los judíos, los gitanos, los negros, los homosexuales, otras simplemente los inmigrantes, porque el problema nunca soy yo, y por lo tanto la solución nunca está en mi mano. Así que no me queda otra que confiar, desde mi analfabetismo absoluto en materia de política, en el que promete salvarme del enemigo exterior o diferente. Lo que ignoro es que algún día vendrá a por mi.

“Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas, guardé silencio,
porque yo no era comunista,
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista,
Cuando vinieron a buscar a los judíos,
no pronuncié palabra,
porque yo no era judío,
Cuando finalmente vinieron a buscarme a mi,
no había nadie más que pudiera protestar.”
                                                                  Martin Niemöller

sábado, 22 de septiembre de 2018

Caballo de Troya



De un tiempo a esta parte, he observado como la industria de la moda, el marketing y los concursos de belleza, en su afán por no perder notoriedad han maquinado una jugada redonda colocando en sus portadas, pasarelas o spots publicitarios a mujeres que parecen no encajar del todo en el estereotipo clásico de belleza, bien sea por su peso, porque tenga síndrome de Down, o porque le falte una pierna o quizás porque nacieron en el cuerpo equivocado. La idea es que el incipiente rechazo en contra de la reducción de la mujer a un simple objeto decorativo se vea, no sólo apaciguado, sino que se revierta convirtiéndose en algo a admirar: “Mira qué bonito, esa chica sin una pierna soñaba con ganar un concurso de belleza y lo ha logrado, esa otra era despreciada por tener sobre peso y mira que bien hoy en día es modelo de pasarela”, etc. Es decir han logrado que parezca que algo totalmente superficial y en muchos casos denigrante para la mujer sea algo digno de admiración, cuando en realidad es un simple lavado de cara, y no digo que no sea un paso en la dirección correcta producido como reacción a la presión popular, pero no se dejen engañar, si no estabas a favor de los concursos de belleza no deberías pasar a estarlo porque lo gane una chica con una sola pierna. No olvidemos que esos conceptos de belleza siguen latentes, sólo es cuestión de observar a cualquiera de los ejemplos anteriormente nombrados para darse cuenta que poco se alejan de los estándares. Un buen ejemplo son las modelos de tallas grandes, lo único que las diferencia de otras de modelos es su talla, pero de resto entran en las proporciones y rasgos físicos comunes en una modelo. Una vez más el capitalismo utiliza un movimiento social para vender y limpiar su imagen, un ejemplo histórico de este modus operandi, es sin duda cuando en los 90 el movimiento Verde tuvo una repercusión importante en Alemania contagiando al resto del mundo y como de pronto empezó a estar de moda los tonos tierra, la ropa de campamento, la estética rural, producido todo ello por macro industrias que producían grandes volúmenes de residuos y contaminación, la historia moderna está llena de ejemplos muy parecidos, si les funcionó tantas veces porque no una más.

lunes, 20 de agosto de 2018

Solo una teoría



Cuando se habla de teorías a nivel científico se refieren a hipótesis totalmente demostradas y contrastadas, véase la teoría de la evolución, o la teoría del Big Bang, por nombrar algunas, el termino teoría, sólo nos indica que es un trabajo en progreso que está por pulir, no es el caso de una ley que se trata de una premisa simple totalmente desarrollada sin más ramificaciones que la propuesta básica. Veamos por ejemplo la ley de la gravedad que sintetizada en una formula simple nos permite calcular la fuerza de gravedad de cualquier objeto que esté sobre la superficie de la tierra, utilizando el valor conocido de aceleración que ejerce la gravedad, pero nada nos dice de por qué se produce dicha atracción, ni como se relaciona esta fuerza con otras, etc. Para dar respuesta a estas preguntas y a otras miles que puede suscitar la Gravedad se plantean Teorías científicas que incluyen estas y otras  leyes en sus propios postulados y desarrollos, es como si una teoría científica fuera una construcción compleja que está formada por leyes que hacen las funciones de ladrillos, es normal que en estas construcciones nos falten ladrillos para completar la construcción, ya que debemos tener en cuenta que en la naturaleza todo está relacionado en un intrincado laberinto que estamos tratando de descifrar, un verdadero trabajo hercúleo, así que es totalmente normal que tengamos huecos en las teorías científicas, pero insisto, esto no le resta veracidad a teorías totalmente contrastadas. No debemos olvidar que ciertos términos de uso común no tienen por qué ser equivalentes en significado en su uso en lenguaje técnico, como es el caso, así que por favor dejen de decir: “Pero es solo una teoría”

lunes, 13 de agosto de 2018

Competir



La famosa frase reza: “Lo importante no es ganar sino participar”
Pues mira por donde no estoy de acuerdo, lo importante no es participar, tampoco es ganar, lo importante es competir, competir sanamente, competir contra ti. La competición lleva intrínsecos gran parte de los  valores del deporte: Constancia, esfuerzo, dedicación, superación personal, espíritu de lucha, ninguna de estas premisas son necesarias para participar en la mayoría de las competiciones deportivas, si lo son para ganar, pero ganar solo gana uno y competir podemos todos.

viernes, 13 de julio de 2018

Patriotismo



El Patriotismo, ese maravilloso invento que lo mismo te sirve para desviar la atención de cualquier corruptela, como para ganar votos insuflando orgullo nacional en los deseosos corazones de los ciudadanos. Marx dijo aquella famosa frase: “La religión es el opio del pueblo” y a pesar de que la interpretación común es que se refería a que la religión era la droga del pueblo, Marx se refería a que la vida del trabajador era terriblemente dura y lo único que aliviaba en parte su dolor era la religión. Hoy en día quizás se entendería mejor esa frase de la siguiente forma: La religión es la morfina del pueblo. Bueno, el hecho es que no solo de religión se droga el pueblo, también de fanatismos deportivo, cotilleos televisivos varios y especialmente de patriotismo, eso que te hace pensar que tu país es el mejor del mundo, y olvidar que puesto ocupa en el ranking de fracaso escolar, en desempleo, en violencia de género, etc. Genéticamente estamos diseñados por la evolución para ser mamíferos de manada, grupos de una media de 30 miembros, mientras mayor sea esta cifra, más se disuelve el sentimiento de pertenencia a dicho grupo, así que para un ciudadano es más fácil sentirse parte de su pueblo y más difícil el serlo en igual medida de su comunidad autónoma, y mucho menos de un país, es entonces en donde entran en juego los símbolos: banderas, escudos, himnos, etc. Los cuales te permiten identificar como parte de tu manada a gente que no conoces de nada, y que poco tiene que ver contigo, la utilización de estos símbolos es tremendamente amplio, desde tribus urbanas, pasando por equipos deportivos, partidos políticos, y acabando en los ya citados países. Desde luego estoy a favor de destacar los elementos que nos unen como personas y no los que nos diferencian, ya que siendo pragmáticos las diferencias son superfluas y la realidad es que todos sufrimos, amamos, reímos y sangramos, es decir todos somos humanos y habitamos el mismo planeta, así que desde luego debemos hacer todo lo posible por buscar un equilibrio entre estas dos tendencias, comportarnos como una gran manada global, a la vez que luchamos por mantener vivas las diferentes características culturales, que sin duda enriquecen a la humanidad. Nunca confundir esto con la manipulación y el chovinismo que significa el patriotismo, estar orgulloso de tu cultura y costumbres es digno de admirar, creer que las tuyas son las mejores y utilizar estas diferencias como barrera, te hace mejor patriota a la vez que peor persona.
Pero esto no es todo, el instinto de manada, no justifica por si solo tanta pasión ciega por pertenecer a un grupo determinado de personas, y es que la humanidad es compleja, por lo cual no podemos olvidar la imperiosa necesidad del ser humano de reconocerse, de saber quién es, y desde luego, ser español (o de cualquier otra nacionalidad) te ayuda a definirte como persona, así que si sumas nuestro instinto más primitivo de agruparnos en manadas, con nuestra necesidad de saber quién somos, producida como un efecto residual de tener un cerebro tan desarrollado que nos permite tener conciencia de existir como un ente individual, a la vez que nos impulsa a preguntarnos ¿quién soy? Lo que obtienes es un peligroso caldo de cultivo, para producir gente xenófoba y fanática, por lo cual debemos estar atentos para no dejar que estos condicionantes se desarrollen produciendo: rechazo al distinto como afirmación de lo que creo ser, y no debemos permitirlo ya que la realidad es que: somos de todo un poco y nada del todo, es decir seres humanos.